Cuando cuidamos nuestro cuerpo, la femineidad se despierta naturalmente y entendemos que hay algo dentro nuestro, misterioso y sutil, que necesita ser redescubierto, relevado y transformado a cada momento. El florecimiento de este espíritu femenino ayuda a fortalecer la autoestima y, como consecuencia, afloran la belleza y sensualidad.
Hoy, las mujeres precisamos reconocernos como únicas mientras desempeñamos diversos roles. Somos madres, esposas y trabajadoras y, a la vez, permanecemos en la búsqueda permanente de nuestra esencia.
Para ayudarnos, están los aceites de Natura Sève, cuya riqueza de texturas nos invita al autoconocimiento, a acariciar nuestra piel. Con fragancias únicas y elaborados productos naturales, esta línea colabora a desplegar la femineidad, abordando las principales necesidades para el cuidado de la piel: hidratación, suavidad y protección.
Sevé significa savia en francés, sustancia vital para las plantas y nutritiva para su subsistencia. Del mismo modo, estos aceites de extrema pureza transmiten vigor, fuerza y energía a nuestra piel, cuerpo y espíritu.
Consejos para encontrar tu esencia
Natura Sève propone redefinir ese momento de intimidad del baño, convirtiéndolo en único y ayudando a que un acto de rutina como ducharse se convierta en uno especial.
Además del uso de los aceites Natura Sève, un incienso, una sal de baño, vapor, y todo aquello que remita a paz y tranquilidad son ideales para crear un ambiente perfecto para adentrarse en la búsqueda del espíritu. También, las fuentes de luces indirectas y suaves como lámparas y velas son constructoras de una atmósfera más amena y confortable para entrar en un contacto más profundo con el cuerpo.
Por otro lado, la suavidad y delicadeza en los gestos y en la manera de tocar son aconsejables, ya que demuestran comodidad y encuentro con nosotras mismas. No hay un movimiento del cuerpo particular para hacer; no importa que sea asimétrico, sino que surja de vos y te produzca placer, que sea una verdadera caricia para tu cuerpo y, por ende, para tu alma.
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